jueves, 6 de abril de 2017

Creo que podría explotar




Hace unas semanas caminé por una senda oscura. 

Caminé todo el día y casi toda la noche, varios días seguidos.


 Apenas dormía y apenas comía, pero no tenía ni hambre ni sueño. 


Por la senda, a mi paso, iban floreciendo las flores, y esto me hizo sentir afortunada, porque no todos los días las flores se abren cerca de tus pisadas. 


Unas luciérnagas venían a mi paso, me iluminaban partes del camino.

Sé que la senda estaba muy oscura, pero no me sentí sola en ningún momento. 


Escuchaba los pájaros cantando, las hojas mecidas por el viento. 


Las estrellas brillaban tan fuerte... 


Cerraba los ojos para no pensar en el miedo que me daba seguir caminando. 




No hubo nada que temer en ningún momento, pero las oscuridades siempre me han hecho sentir pequeña. 


Apretaba los puños y continuaba el camino. 


El miedo a lo desconocido nos convierte en vulnerables. 


Fui valiente y seguí pese a todo.


 Caminé con fuerzas por el bello sendero. 


Me sentí alegre de llegar al final. 


Pero no creerás lo que había al final. 

Nada.


 ¡No había nada! 


Tantas horas caminando, superando mis miedos, para no encontrar nada. 


Me miré los pies, que, sin darme cuenta, estaban llenos de heridas por las piedras. 


Me miré los brazos, estaban llenos de arañazos de las ramas. 


Yo no había notado este dolor mientras andaba. 


Me hallaba ahí, justo donde acaba el camino. 


Ahí me encontraba, mirando al infinito.


 -"Creo que podría explotar, porque tengo la cabeza llena de pensamientos y preguntas"-pensé.


Mi alma tenía una sensación agridulce, porque realmente disfrutó del camino, pero ahora tendría que seguir otro. 


Pero entonces, Dios habló a mi alma y le dijo: "No te quedes parada aquí. Dónde tú no ves nada, yo puedo ver todo. Algún día tú podrás entender con tu mente lo que veo yo con mis ojos. Siendo yo el que ve de los dos, fíate de mí."



Por su voz me pude levantar, por su voz pude sonreír, por su voz pude buscar otro camino que me hace muy feliz.


 Le doy las gracias por mostrarme siempre otro camino, mejor que el que yo misma hubiera elegido. 

Espero que os haya parecido interesante este post, no dudéis en comentarme vuestra opinión, ¡siempre leo vuestros comentarios!


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¡Nos leemos pronto!



Irene Vila 




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